martes, 21 de abril de 2020


EL DECAMERÓN DE GIOVANNI BOCACCIO: LECTURAS PARA TIEMPOS DE PLAGAS, PESTES O VIRUS COMO LA COVID 19.

BOCACCIO, Giovanni.
El Decamerón.
 Editorial Gráficas Modernas.
Bogotá, 2005.
 476 páginas.









“En estas narraciones se encontrarán placenteros lances de amor, con otros fortuitos acontecimientos, tanto de los tiempos modernos como de los antiguos. Las mujeres que esto lean podrán sacar provecho de las cosas de solaz que aquí se encuentran, y a la vez útiles consejos para conocer lo que deben rehuir y lo que deben imitar, cosa difícil, si sus ansiedades no se disipan. Si esto ocurre (¡Dios lo quiera!), den gracias al Amor, que al librarme de sus ligaduras, me ha permitido ocuparme de sus deleites”.
GIOVANNI BOCACCIO, EL DECAMERÓN.


El propósito de este texto es lograr un acercamiento a la obra del escritor italiano Giovanni Bocaccio en especial a su obra titulada El Decamerón de la cual daré mis impresiones y análisis así como algunos datos de interés general. Para esto, comentaré algunos rasgos de la vida de este autor como también algunos comentarios sobre la obra mencionada y de la actualidad, en que vivimos o sobrevivimos en medio de una peste negra o pandemia causada por un virus llamado de forma poco literaria, COVID 19.

En un primer momento, podría decir que Giovanni Bocaccio nació en París en el año de 1313. Es decir que vivió en el siglo XIV, aunque posteriormente se trasladó en Italia, probablemente en Florencia. Esto significa que la vida del autor transcurrió en medio de un contexto histórico de transición entre la llamada Edad Media y el Renacimiento. Un ejemplo de ello lo vemos en los cuentos de su libro titulado  Decamerón, cuando se hace presente la Peste Negra, que azotó a toda Europa en ese periodo. Asimismo, los cambios en la sociedad que se evidencian en los personajes del mencionado libro, quienes abandonan la vieja aristocracia y crean una burguesía que genera una intensa actividad comercial en las ciudades italianas que se convierten en grandes centros artísticos y literarios. Pero también llenos de crimen y delincuencia, debido al auge de los mercaderes o mejor burgueses que acumulaban grandes riquezas. Es lo que vemos en la historia de Andreuccio di Pietro, quien se dirige a Nápoles a comprar caballos y sufre en una noche tres grandes peligros de los cuales se salva. Al final regresa a su hogar con un rubí enorme que estaba en la tumba de un clérigo recién muerto:

“La joven, advirtiendo primero el dinero que llevaba el joven, y luego la confianza que le tenía la vieja, resolvió apoderarse de la mayor cantidad de dinero que pudiera; (…)” Pág. 87.

Otros datos de interés sobre la vida de Giovanni Bocaccio es que fue gran amigo del poeta Francisco Petrarca y un gran admirador de Dante, escritor reconocido por su obra La Divina Comedia, por quien dicen, Bocaccio sentía una gran reverencia.

Ahora bien: ¿Qué significa su título? Deca, que es una palabra para decir cien, podría sugerir que se trata de un libro constituido por 100 cuentos. De hecho, la historia parte de la ya mencionada Peste Bubónica o Negra que como dijimos azotó Italia, en especial Florencia, donde vivía el autor. Así lo describe Bocaccio:

“Esta peste cobró una gran fuerza, los enfermos la transmitían a los sanos al relacionarse con ellos, como ocurre con el fuego a las ramas secas, cuando se les acerca mucho. Y el mal siguió aumentando hasta el extremo de que no sólo el hablar o tratar con los enfermos contagiaba la enfermedad a los sanos, y generalmente muerte, sino el contacto con las ropas, o con cualquier objeto sobado o manipulado por los enfermos, transmitía la dolencia al sano”. Pág. 11

Otro texto del que podemos hablar es la novela moderna del Premio Nobel francés, Albert Camus, titulada La Peste. Se trata de la misma peste negra o bubónica de la que hablamos. Aunque ambientada en la ciudad argelina de Orán, en el siglo XX. Se trata de una peste negra mucho más destructiva, pus pudre el alma ya de por sí pútrida de seres mezquinos, miserables, muertos en vida. 


Máscara de bio-seguridad en la Edad Media.
También se acerca de forma intertextual al cuento de Edgar Allan Poe, titulado: La máscara de la muerte roja. Se trata en este caso de un contexto medieval, donde la muerte nos acerca de forma vertiginosa a la poética del horror y el ensueño. Un muerte sangrienta que atacará a los confinados con el príncipe Prospero y acabará con todos sin risas, ni erotismo, de forma macabra. Otro relato de este tipo, de Jonatan Swift será el diario del año de la peste.Con lo cual es posible deducir que estos temas resultan recurrentes en la imaginación y son motivo de reflexión, incluso en la actualidad con nuestra propia plaga:el COVID 19.  

La máscara de la Muerte roja. De E. A.Poe.

Debido a este tipo de pandemias, un grupo de 10 personas de la alta sociedad (siete mujeres y tres hombres) se refugian en una finca a las afueras de la ciudad para pasar el tiempo y huir de la peste contando historias. Así es como estos personajes se van rotando el turno para narrar los cuentos hasta completar las cien. Así las cosas, El Decamerón gozará de cierta unidad temática y coherencia que la convierte en un texto innovador para su época, sin ser una novela, claro. Pero ¿cuáles son los temas principales de esta obra? Podríamos pensar que el amor y la vida en sociedad que surgía en las ciudades como Florencia. 

En algunos cuentos, las mujeres se burlan de sus maridos, los engañan y demuestran una gran astucia. Así, esta idea del amor se acerca más a lo carnal, sensual y erótico que a lo ideal y pecaminoso de la edad Media. Además, la mujer se equipara al hombre en astucia o inteligencia. Recordemos que siete de las narradoras son del género femenino. Veamos este ejemplo en un fragmento de un relato donde Peronella, al regresar su marido a casa, se esconde en un tonel. Dice al marido que ha vendido la barrica, y ella alega que ha vendido a su vez otro que para probar su solidez se ha metido dentro. Sale el amante, se muestra al esposo y se lleva el tonel:

“-Queridísimas amigas mías; los hombres os hacen mucha burla, sobre todo los maridos, pero a veces sucede que una mujer se la hace al marido; entonces debeís alegraros y pregonarlo a todos los vientos, para que los hombres se enteren de que si ellos son astutos, vosotras no sois tontas. Esto puede seros de utilidad porque cuando uno sabe que otro sabe, no se atreve ligeramente a engañarle.” Pág. 307.



Otro tema de relevancia es la Iglesia católica o cristiana y sus excesos. En “El Decamerón”, hallamos ejemplos de la corrupción clerical, monjes que manifiestan sus deseos sexuales, asimismo monjas con apetito carnal… También se critica la acumulación de riquezas de los representantes de la iglesia. Pero leamos un fragmento de un cuento, donde un monje, que comete el pecado del adulterio se libra de la pena reprendiendo a otro monje por su culpa:

“El monje, aunque con grandísimo placer y deleite estuviera ocupado con aquella joven, no dejaba sin embargo de estar temeroso y pareciéndole haber oído algún arrastrar de pies por el dormitorio acercó el ojo a un pequeño agujero y vio clarísimamente al abad escuchándole y comprendió muy bien que el abad había podido oír que la joven estaba en su celda. De lo que sabiendo que ello debía seguirle un gran castigo, se sintió desmesuradamente pesaroso; pero sin querer mostrara a la joven nada de su desazón, rápidamente imaginó muchas cosas buscando hallar alguna que le fuera salutífera. Y se le ocurrió una nueva malicia (que al fin imaginado por él consiguió ciertamente) y fingiendo que le parecía haber estado bastante con aquella joven le dijo: Voy a buscar la manera en que salgas de aquí dentro sin ser vista, y para ello quédate en silencio hasta que vuelva.” Pág. 44.

Tras esto, el monje engaña al abad y le da la llave de su aposento, donde aguardaba la jovencita. Este, siendo viejo y ella joven y bella, logra despertar en este el deseo y no delata al monje sino que se acuesta con la mujer. Luego es sorprendido por el monje quien había fingido ir al bosque y entre ambos ocultan su conducta entre comillas, pecaminosa.




 Esto nos hace pensar que, según el Decamerón de Giovanni Bocaccio el hombre es un ser con vicios y virtudes: no un ángel o demonio como pretende la religión medieval de entonces desde su visión de mundo teológica, teocentrista, dogmática, hipócrita  y cegada por la ambición. Por ejemplo, en otro cuento, un hombre, el señor Cepparello engaña a un fraile ingenuo con una confesión falsa y después fallece, y sin importar que hubiera sido un malvado en vida, muere siendo beatificado llamado San Ciapelletto. Veamos un fragmento de esta historia:

“Si se le invitaba a algún homicidio o a cualquier otro acto criminal, sin negarse nunca, de buena gana iba y muchas veces se encontró gustosamente hiriendo y matando hombres con las propias manos. Gran blasfemador era contra Dios y los santos, y por cualquiera cosa pequeña, como que era iracundo más que ningún otro. A la iglesia no iba jamás, y todos sus sacramentos como a cosa vil escarnecía con abominables palabras; y por el contrario las tabernas y los otros lugares deshonestos visitaba de buena gana y los frecuentaba.”Pág. 28.

En este fragmento vemos la idea que del hombre renacentista tenía Giovanni Bocaccio, que como ya he mencionado, era una suma de vicios y virtudes. En otro relato, una monjas dan hospedaje a un hombre a quien creen mudo. Pero resulta que este no lo es y lo finge para aprovecharse de esta y su hospitalidad en el convento. Sin embargo, las religiosas se dejan llevar por el deseo y la belleza y juventud de este las hace sucumbir en los pecados de la carne. Veamos un fragmento:

“-No sé si has pensado lo sobriamente que vivimos –dijo la atrevida-, ya que aquí no puede entrar ningún hombre, excepto el mayordomo , por viejo, y éste , por mudo,. Yo he odio decir a mujeres que el placer mayor de todos es el de hombre y mujer. Yo he pensado que, ya que no puedo con otros, podría ensayarme con el mudo, y además sería lo más prudente, porque no diría nada, ¿qué opinas?
-¡qué dices –dijo la otra- .¡Hemos prometido a dios nuestra virginidad!” Pág.148

Una noche, el hombre, cansado del acoso de las monjas, para quien según él ya no daba abasto, decide hablar. La abadesa, sorprendida declara que es un milagro y nombra administrador al hombre, quien convive con todas, hasta mucho tiempo después.

Fotograma de la adaptación cinematográfica del Decameron, por el cineasta italiano Pier Paolo Passolini.


Como hemos visto, este libro es de gran importancia para analizar la situación ocurrida en el siglo XIV en Italia, en la transición de la Edad Media al llamado Renacimiento. Es muy agradable su lectura pues genera risas y está lleno de situaciones ridículas. Como el mismo autor nos dice a modo de conclusión, no es para cualquier tipo de lector. El mismo Giovanni Bocaccio a manera de conclusión nos dice:

“Nobles damas a quienes he dedicado, esto para consolaros; creo haber cumplido mi propósito, y por ello doy gracias a Dios y a vosotras.” Pág. 475.

El libro me pareció muy humano, irónico, sardónico y mordaz, porque los cuentos son breves y están llenos de burlas y mofas, como dice el mismo autor, además presenta una visión crítica sobre los abusos de los hombres y mujeres de la religión. 

A modo de cierre, recomiendo la lectura del Decamerón una y otra vez si lo que se pretende es pasar un buen rato, aprovechar el tiempo, conocer historias de amor y desamor, de las nacientes ciudades modernas, aprender sobre la Historia europea del siglo XIV, enmarcada en la Peste Negra y reír mucho. O en estos tiempos donde la cuarentena obligada ha trasformado los hábitos de vida, ligados a la tecnologías de la información y la comunicación, se tornan imprescindibles para estudiar o trabajar e interactuar forma social, leer se convierte en una de las mejores formas de no perder el tiempo.Además de preservar la vida en medio de la pandemia y la cuarentena.Pues no olvidemos, con palabras de Luis Vidales, en su minicuento, del libro Suenan timbres, que:

Superciencia

Por medio de los microscopios, los microbios observan a los sabios. 


Imagen microscópica del COVID -19. 


POR:
VÍCTOR HUGO OSORIO CÉSPEDES
LIC. LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA
I.E.T. LEPANTO
MURILLO, 21-04-2020

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